martes, 4 de octubre de 2011

Térmicas Y Nubes

Térmicas y nubes.

Este articulo hace foco en nuestro mejor indicador de térmicas, las nubes. Hay docenas de libros escritos acerca de gradiente de temperatura y todo eso, entonces las ideas que se presentan aquí tienen más relación con la cosa práctica de volar en las nubes y con los indicios que nos da el cielo. No es un texto de meteorología, así que perdóneme las grandes simplificaciones que hago.

Lo básico para entender que sucede en el cielo puede conocerse mirándolo. Leer libros (o artículos como este) ayuda, pero usted necesita tener su propio sistema de interpretación del cielo para volar bien. Todo buen piloto que conozco ha pasado cientos de hora, literalmente, mirando al cielo para entender que pasa allí arriba en lo del barba. Yo pasé muchos días de esos que hay tanto viento que no se puede volar acostado en mis espaldas mirando como el cielo se arremolinaba sobre mí, y este fue casi el tiempo más valioso que dediqué al vuelo. Son las nubes el resultado de pulsos? Permanece la nube sobre un punto o se forma sobre un punto y luego deriva con el viento a medida que se desarma? Hacen un ciclo “de libro”, comenzando con finas barbas convirtiéndose luego en masas nubosas bien definidas y sólidas hasta decaer? O apenas surgen las primeras barbas ya comienza a desaparecer? Tienen bases densas y planas o las bases son redondeadas y tienen aspecto pulposo?. La respuesta a estas preguntas provee jugosa información acerca de las térmicas que producen estas nubes. Las nubes son muy variadas, pero creo que tienen signos que pueden descubrirse cuando uno las mira.

Lo importante aquí es entender que el ciclo de las nubes está íntimamente relacionado con las características de las térmicas que las generan. A medida que el aire caliente se eleva éste alcanza una altura en la que comienza el proceso de condensación. Este proceso continúa solo si la nube sigue siendo alimentada por la térmica. (condensation “pumps” se comportan como si fuesen térmicas, de manera que las trataré como lo mismo para simplificar). En algún momento el reservorio de aire caliente que había en el colector se acaba, pero la nube sigue siendo alimentada por la última burbuja que se eleva sobre el terreno. Hasta que no existe más aire que alimente la nube y ésta comienza a decaer, y en este momento no queda ninguna ascendencia debajo de la nube. Esta es la razón por la cual una nube que luce de lo mejor a veces no tiene nada debajo cuando uno la explora. Aún de buen aspecto, está en el fin de su ciclo de desarrollo. A medida que las nubes se desarman, producen en realidad aire descendente, lo cual es muy inoportuno si usted vuela hacia una nube que espera sea un ascensor a la base. Lo mejor es conectar el aire que alimenta la térmica con la nube que aún está creciendo. Entonces, cómo distinguirlas?.

Es simple. Hay que tratar de distinguir cuando la nube está creciendo o muriendo. Antes de hacer esto en vuelo, trato de jugar a predecirlo observando las nubes mientras corto el pasto, manejo o cuando miro por las ventanas de la oficina. Elija una nube y realice una repentina decisión: aún se está formando o ya está muriendo?. Luego cuidadosamente siga la evolución de la nube a través de su ciclo. Si usted opinó que estaba creciendo, la nube crecerá en tamaño (ya sea horizontalmente, verticalmente o en ambos) y también se volverá más resistente a dejar pasar la luz (más agua en suspensión significa que se pasó de las primeras barbas a pequeñas volutas de humedad, del color blanco al gris). Si estaba decayendo, se volverá más transparente a la luz y se fragmentará lentamente en piezas más pequeñas. Cuánto lleva este proceso? Dos minutos? Diez? Veinte? O se desarrolla en un cúmulo mounstroso devorador de alas?. Rara vez hago buenas predicciones basadas en una sola observación. Pero después de mirarla por un par de minutos usualmente puedo decir en que dirección está evolucionando. Creo que es absolutamente básico entender el ciclo de las nubes si usted quiere volar XC. Esto es el equivalente aéreo de saber leer.

Michael Champlain, uno de los mejores pilotos de XC que conozco me habló de un buen truco para entender que están haciendo las nubes mientras uno vuela. Él recomienda sacar una serie de fotos mentales del cielo a medida que uno sube en una térmica. En cada giro miro a sotavento y saco una “instantánea” de como lucen todas las nubes que están en mi dirección de vuelo. Una buena trepada puede permitirle tener unas 30 o más instantáneas de la parte del cielo que le interese, y con un poco de práctica aprendí a memorizar cuales nubes crecen y cuales no. Con unas cuantas térmicas mis “instantáneas” también me dan información acerca de cuánto duran las nubes, lo cual es muy oportuno para saber si la nube hacia la que planeo aún es utilizable. Si los ciclos de las nubes duran 30 minutos, luego puedo planear durante 10 ó 15 minutos y aún encontrar algo al llegar.

Generalmente si hay mucha distancia entre nubes entonces tendrán ciclos de vida más largos (un gran volumen de aire está alimentando una “sola” nube) y la vida será más larga. Si usted planea hacia una nube que se ha estado formando por 30 minutos y llega “bajo”, las posibilidades de encontrar algo son pocas, no importa cuan bien luzca la nube arriba suyo.

Muchos pilotos cometen el error de subir hasta la base y tirarse a la nube que luce “bien” sin importarles en que parte de su ciclo de vida esté la nube. Si llega a una nube después de su ciclo de vida utilizable, esto es peor que planear hacia un agujero azul total, porque seguramente habrá descendentes debajo de ella. Además el suelo habrá permanecido en sombras, otra cosa en contra. Pero si usted está cerca de la base y ve formarse unas pequeñas hilachas blancas dentro del radio de planeo y se dirige en esa dirección, entonces las probabilidades de quedarse en el aire son muchas.

Bue, usted está en planeo hacia una nube en formación, dónde encuentra la térmica? Nuevamente, observando los ciclos de las nubes. Si el viento en altura es más fuerte que el de superficie las nubes se formarán en el lado de barlovento y se desarmarán en el lado de sotavento. Si el viento es tiene mas intensidad arriba en relación con el que sopla en superficie, las nubes se formarán en el lado de barlovento y se disiparán en el lado de sotavento. En este caso la térmica estará inclinada con un ángulo definido por la línea que une la nube con la fuente. Si usted tiene un GPS o aprende a observar la velocidad-suelo incluso cuando esté alto, se podrá dar cuenta cuanto gradiente hay y por consiguiente cuanto se inclina la térmica. Como regla general, considero que las térmicas se inclinan hasta 20 grados cuando el gradiente de viento es de 10 mph o menos, este ángulo será de 30 grados si el gradiente es de entre 10 y 20 mph. Tenga también en cuenta que el gradiente no es lineal; hay días en los que el gradiente es particularmente fuerte en un nivel, a una altitud y en otras no es tan notable. Las térmicas estarán desorganizadas pero si usted logra cruzar esta barrera tendrá asegurado el ticket hasta la base. Recuerde esta altitud y anticípese dando batalla para atravesarla cuando vuelva a vivir esta situación en la próxima térmica en lugar de darse por vencido y abandonar la térmica.

Algunos de los vuelos de cross más frustrantes se dan cuando el viento en altura es más débil que en superficie. He encontrado esta situación muy a menudo y no podía entender donde estaba el ascenso, hasta que me di cuenta que las nubes se formaban en el lado de sotavento y se disipaban en el lado de barlovento. En esta situación busque a sotavento de la nube.

El borde y la textura de las nubes también proveen de información muy útil. Las nubes que son más altas que anchas tendrán fuertes térmicas debajo y generalmente una tendencia al sobredesarrollo hacia el final del día (no me hagan arrancar con lo de la inestabilidad). Nubes hinchadas y cercanas unas de otra que tienen ciclos relativamente cortos y que nunca logran tener bases planas y oscuras generalmente no tendrán buenas térmicas debajo pero la débil ascendencia será fácil de encontrar: vuele a sotavento y probablemente encuentre algo. Dado que estas nubes tienen ciclos muy rápidos es casi imposible estimar el tiempo justo de arribo debajo de una que aún esté en formación. Sin embargo, esta clase de nubes se originan de masivamente en grandes áreas de manera que al estar cerca unas de otra las posibilidades de quedarse en el aire son muchas. En los días húmedos el cielo estará cubierto de cúmulos espaciados regularmente. Por desgracia solo alguna de estas nubes estarán activas mientras que la mayoría estará desarmándose. En los días secos la mayoría de las nubes estarán activas, pero asegúrese de llegar debajo de una de ellas mientras todavía esté activa. Finalmente, nubes con bases planas y oscuras son el festival, alimentadas de forma continua. Bases redondeadas por lo general indican térmicas no muy organizadas.

En días con grandes nubes, ponga mucha atención a la parte de la nube más alta. La mejor ascendencia alimentará casi siempre esta parte de la nube. A medida que ascienda a la base de un vistazo, puede que usted esté llegando más alto que otra parte de la base. Esto es muy común cuando volamos en convergencia o en la unión de dos masas de aire de diferente humedad. He visto nubes con escalones de 1200 mts. en la línea seca de Texas. Además de saber debajo de cuales nubes volar hay gente que quiere saber debajo de cuales es conveniente no hacerlo. A menudo es difícil saber que está haciendo la nube debajo de la cual volamos sobre todo cuando nos acercamos a la base porque la misma nube tiende a bloquear la vista que tenemos de sus lados, sin embargo, usted puede con cada giro llevarse a la memoria “instantáneas” de lo que está ocurriendo alrededor con las otras nubes. Es posible que usted esté debajo del único cúmulusninbus que halla en el cielo pero esto es raro que ocurra: generalmente hay una tendencia. Si el cielo se está sobredesarrollando, es mejor que baje no importa que cosa tenga arriba suyo. Incluso las nubes grandes pueden tener ciclos regulares. Algunos días con cúmulos de 8 km. a 16 km. de ancho pueden ser buenos para volar, pero en cuanto estas nubes crecen más en el sentido vertical yo busco una porción de cielo más saludable o sino me voy a aterrizar. Después, ya con el ala asegurada me gusta mirar esas nubes para ver que ocurre con ellas. Completan su ciclo de manera inofensiva? Se siguen desarrollando? Y si es así, cuanto tiempo transcurrió entre el momento que decidí terminar con al vuelo y el momento en que la primera ráfaga llega al suelo. Ocasionalmente me sentí frustrado por aterrizar demasiado temprano pero las veces que me arriesgué un poco mas fueron de verdad terroríficas. Cuanto más vuelo más conservador me vuelvo. Si las nubes comienzan a spiking (púas) de forma radical y lucen como puños en un día en que se pronostican tormentas aterrice inmediatamente. Observar el cielo mientras se vuela no es solo para encontrar el próximo ascenso sino que es esencial para volar seguro. Esto me lleva a la parte central de este artículo: en general las nubes se forman en respuesta a causas que interactúan entre sí. Puede que se trate de una combinación de factores o de cientos de ellos (de nuevo es mejor saber algo de meteorología, compre el libro) pero son estas áreas de inestabilidad aquellas en las que queremos volar para encontrar algo. Me la pasé volando desatinadamente a través de grandes agujeros azules encontrando suficientes descendentes como para creer esto. Casi siempre vale la pena volar un agujero azul por el borde de una nube que lo delimita en lugar de atravesarlo. No importa cuanto más directo parezca el curso “azul”. Los planeadores se pueden dar el lujo de hacer largas transiciones, nosotros no. Muchos pilotos sueñan con volar debajo de una calle de nubes derecho hasta que oscurezca. Si bien esto ocurre ocasionalmente a mí me dio más resultado tratar las calles de nubes como si fuesen nubes individuales pero conectadas. Si la calle se configura con bases planas y oscuras y este color se mantiene (denso y no debilitándose ni tampoco sobredesarrollándose a medida que usted la atraviesa) entonces acelere tanto como su comprensión de velocidad a volar le permita. Pero anticípese y vea que está ocurriendo adelante. Tarde o temprano las nubes se acabarán y usted deberá prestar atención a lo que ocurre adelante y también a los costados. A menudo es mejor tratar a los huecos grandes en las calles como si fueran un agujero azul mas: “saltar” a los lados si el hueco que tenemos adelante es mayor que el trayecto que implicaría cambiar de calle.

Muchos días azules en realidad ofrecen indicios que provienen del cielo. Para comenzar, aún si la nube no se forma en el tope de la térmica, “haze domes” (neblina)si lo hará. Estas son áreas donde la luz se refracta de una manera diferente debido a un distinto contenido de humedad, debido al polvo, o también a una masa de aire diferente. Yo he visto este tipo de fenómeno volando en días relativamente estables en México y el desierto al sudoeste. Esto se caracteriza por tener el cielo un color no tan azul. Estas “neblinas localizadas” son también el estadio que precede a la formación de las nubes. En la mañana puede llegar a ver estas “neblinas” en el borde superior de la capa de inversión, será el indicador de que allí hay algo y que probablemente será una de las primeras áreas en romper la inversión y formar nube. Los días azules también pueden formar dust devils. Usted puede ver algunas veces heno o algún otro desperdicio volando, eso es otro indicador

Estrategias de vuelo:
El modelo clásico de formación de una térmica consiste en un cilindro de aire que alimenta una nube. Yo me imagino las térmicas como si fuesen árboles con térmicas-raíces más pequeñas que alimentan otras más grandes hasta llegar al tronco y entonces se dirigen a la nube, en la medida que usted esté más alto, más separados estarán estos troncos y más cerca de las bases deberá volar para encontrar alguno. Cualquiera que halla estado en una competencia habrá podido ver alas subiendo relativamente cerca unas de otras pero en diferentes núcleos hasta que todos los pilotos terminan girando el mismo núcleo hasta la base. Las alas que están con poca altura pueden sacar ventaja de las pequeñas térmicas-raíces no de las térmicas-tronco. Si usted está “bajo”, o sea, por debajo de la mitad de la altura que ese día en particular tiene la base, entonces es más probable que pueda sacar provecho de los pequeños núcleos que suele haber en estas alturas. A los planeadores les resulta un poco más complicado aprovechar estos pequeños núcleos debido a la velocidad que les impide girar en círculos pequeños. En este caso nosotros tenemos más a favor: podemos girar en estos térmicas “bajas” y subir hasta que estas “raíces” se expanden y se unen a otras. Entonces recuerde, si está por debajo de la mitad de la altura que ese día tiene la base olvídese de encontrar un gran núcleo que conecte con la nube, la mayoría de las nubes están alimentadas por varios núcleos múltiples que se unen, luego será mejor buscar sobre colectores y disparadores a barlovento de las nubes. También recuerde de que manera el gradiente de viento afectará la inclinación de las térmicas: las térmicas pueden hallarse a sotavento de las nubes en esos días de gradiente invertido.

Por lo general trato de conectar los colectores y disparadores con las nubes que estén alimentando. Esto también es muy bueno para saber en que parte del ciclo estará la nube. Por ejemplo, las nubes que se forman sobre cadenas montañosas son generalmente derivadas a sotavento. Una vez que la térmica es separada de su fuente puede que todavía halla ascenso pero solo debajo de la nube en la medida que la burbuja continúe alimentándola, pero para encontrar algo deberá arribar con buena altura para poder subir allí no importa cuan buena luzca la nube.

Cuanto más alta sea la base, más largo será su planeo hasta la próxima térmica (a menos que tenga la suerte de estar debajo de una calle, en una convergencia o algo así). Reichmman predice que las térmicas se encuentran separadas unas de otras a una distancia de 2,5 veces la altura de la base. Si la base está a 1500 mts., entonces la distancia entre las térmicas-tronco será de 3750 mts. o sea de mas o menos 4 km. (la distancia entre las raíces será un poco menos). Aún cuando su ala tenga una relación de planeo de 5 a 1 usted debería tener buenas posibilidades de interceptar una térmica antes de interceptar el suelo!. Teóricamente es muy raro planear desde la base hasta el piso sin encontrar algo. En realidad, me pasó varias veces, particularmente en días azules; pero haciendo un balance, en todas aquellas veces que planee hacia un gran agujero azul o perdí altura mientras volaba por una calle de descendentes solo debiera haber girado 90 grados en el momento de tener altura = ½ de altura de la base para poder encontrar algo. En le llano creo que las térmicas se alinean de la misma manera que las descendentes. Incluso en días azules, el lugar más lógico para encontrar una térmica es sobre un buen colector/disparador a sotavento de su último ascenso.

En las montañas las térmicas y nubes generalmente se forman sobre cadenas de cerros que pueden o no estar orientados de la misma manera que su ruta prevista o el viento. Si está cruzando cualquier cosa excepto valles muy angostos en días de techos altos, usted deberá basar sus decisiones no tanto en que está haciendo la nube sino en las tácticas de vuelo con indicios del terreno que se vieron en el artículo anterior. Si está cruzando regiones pequeñas mientras vuela a lo largo de una cadena entonces suena razonable usar las nubes para planear su próximo ascenso, especialmente en el Oeste de USA donde la base puede exceder el límite impuesto de 5400 mts.. La mayoría de las cadenas montañosas en USA corren de Norte a Sur mientras que los vientos lo hacen de Oeste a Este. Un buen truco para cruzar los valles entre las cadenas de montañas es subir hasta la base y luego dejarse derivar sobre el llano “colgado” debajo de una nube. Es un recurso un poco lento, es verdad, pero el vuelo de cross a menudo consiste en permanecer en el aire y no tanto en la velocidad. Yo usé este recurso varias veces en King-Mountain y en otros sitios y superé alas que tenían mejor relación de planeo. Tarde o temprano la nube se empezará a desarmar y usted deberá estar atento antes de que esto ocurra para no tener que lidiar con aire descendente. No se desanime si no llega a la base. Generalmente se logra esto en días con térmicas bien organizadas que concluyen en nubes densas de bases planas. En días más húmedos con curvas de estado más pobres (oops, me metí con lenguaje técnico...) habrá muchas nubes pero no habrá manera de llegar a ellas. Fíjese que altura logra en su ascenso en el momento en que la térmica deja de funcionar y cuantos metros arriba suyo quedó la base. Si su primer ascenso terminó a los 1800 mts. y la base parece estar a 2400 mts. entonces será muy probable que sus próximas o al menos las inmediatas den un resultado similar a menos que las nubes luzcan mejor o la base empiece a subir. El techo generalmente mejora con el transcurso del día y los ascensos también mejoran más tarde. Si las bases están en 3000 mts. y comienzan a lucir bien entonces puede esperar subir alto y cerca de la base. El mejor camino para comprender el cielo es estudiarlo con un fervor cuasi-religioso. Lea los libros, entienda la meteorología del día y confróntela con lo que vive mientras vuela. Aún si no puede ir a volar debido a obligaciones terrenas aprenderá mucho acerca del vuelo. Esto será de vital importancia para tomar decisiones cuando esté colgado debajo de su ala.

Técnica



VOLAR EN ALA DELTA


El ala delta es un planeador que se maneja por desplazamiento de peso del piloto, el cual está colgado del centro de gravedad del mismo.
Para que el ala vuele es necesario tener una velocidad con respecto al aire, lo que hace que se cree una “fuerza de sustentación” al chocar dicho aire con el perfil del ala. Pero por desgracia, el propio peso hace que descendamos, por lo que para que esto no ocurra deberemos buscar ascendencias, bien en vientos que chocan con un relieve (vuelo de ladera), o en aire caliente que
asciende (vuelo en térmicas).
Para poder dirigir nuestro ala delta, deberemos desplazar nuestro cuerpo con la ayuda de la barra de control:

-Si nos desplazamos hacia adelante (picamos), el ala aumenta su velocidad, disminuye el ángulo de ataque, y aumenta la velocidad de caída.

-Si nos desplazamos hacia atrás (empujamos), aumentamos el ángulo de ataque y disminuimos la velocidad. Si nos pasamos empujando y perdemos velocidad por debajo de cierto valor, el ala pierde sustentación, y entra en pérdida, tendiendo a caer hacia un lado o hacia adelante, para volver a recuperarse una vez alcance la velocidad mínima de vuelo.

-Si nos desplazamos hacia un lado, el ala tiende a girar hacia ese lado, siendo necesario tener velocidad para que responda. Para cualquier maniobra que queramos realizar, cuanta más velocidad tengamos, mayor rapidez de respuesta obtendremos de nuestra ala.

Por lo tanto principio fundamental del vuelo VELOCIDAD = SEGURIDAD

DESPEGUE DE UN ALA DELTA



El despegue, junto con el aterrizaje, es uno de los momentos más críticos del vuelo. Debemos por lo tanto poner nuestra atención en todos los detalles para no tener ningún contratiempo. Una parte importante, es el correcto montaje de nuestra Ala y la comprobación de la misma, así como de nuestro cuelgue, hay accidentes producidos porque el piloto se olvidó de colgarse de su Ala. Posteriormente, al levantar el Ala, debemos orientarla al viento, buscando el ángulo de ataque adecuado que nos
permita controlarla. Con viento, ésta operación es más sencilla que sin él, pues éste nos hace sentir la fuerza del Ala, y nos permite corregirla y mantener el control de la misma hasta que tenemos suficiente velocidad para el despegue.

Debemos mantener un punto de referencia en el horizonte, y tratar de hacer las correcciones oportunas para seguir esa trayectoria sin preocuparnos de hacerlo con nuestras piernas, sino con la corrección de nuestro cuerpo. No viene mal practicar en la campa de escuela para lograr la velocidad y ángulo de ataque adecuados, sobre todo para los días sin viento, que son en los que el Ala nos transmite menos sensaciones hasta que estamos volando. Por lo tanto, la mejor referencia para encontrar el correcto ángulo de ataque de nuestra Ala para despegar, así como la velocidad de respuesta de la misma, la podemos encontrar corriendo con ella en la
campa.

Dependiendo de la pendiente de cada despegue, ajustaremos nuestro ángulo de ataque para tener nuestra Ala siempre bajo control. Una vez tengamos esto controlado, debemos aprender a correr. Nuestra carrera debe comenzar despacio, con pasos largos y decididos, acelerándolos a medida que el Ala coge velocidad, lo que nos permitirá un buen control, y cuando ésta velocidad sea suficiente y notemos que tira de nosotros, aflojamos un poco la barra de control, y YA ESTAMOS EN EL AIRE.

Historia del Ala Delta

Los inicios del vuelo en ala delta son muy similares a los ya descritos en la parte del libro dedicada al parapente. El viejo sueño del hombre de volar, se hizo posible a principios de siglo, coincidiendo con una era de fabuloso desarrollo industrial, que junto con la ingeniería progresaban día a día.
Investigadores, científicos, pilotos y aficionados se hicieron famosos en ésta época, entre ellos Wolf Hirth, quien fue el primero en descubrir el uso real de las térmicas. Pero aunque se contaba ya con los materiales necesarios y se habían solucionado los problemas estructurales, nadie fue capaz de desarrollar el concepto del diseño rogallo, que aún tardaría en aparecer.

F. Rogallo comenzó a trabajar para la NASA en la década de los cuarenta y en los años posteriores consiguió cerca de 20 patentes. El inicio de la afición por las alas delta, en la década de los sesenta, hizo un uso inevitable de los diseños de Rogallo, hasta el punto de que las primeras alas se denominaban con su nombre.

El éxito de Rogallo fue la simplicidad de su diseño, su ligereza, su robustez y los bajos costes, que permitieron de forma definitiva, poner el vuelo al alcance de todo el mundo.

 El equipo
·La cometa
·El casco
·La radio
·El variómetro
·El arnés
·La vestimenta
·Otros instrumentos
 

Técnica
La técnica debe aprenderse en una escuela, donde profesionales con amplia experiencia nos indiquen los pasos a seguir. Lógicamente realizaremos un avance progresivo, acompañando clases teóricas y prácticas hasta que consigamos volar por nosotros mismos.

-Antes de volar
Debemos conocer perfectamente nuestra cometa y ser capaces de realizar un análisis antes del vuelo de todas sus partes, su estructura y accesorios para detectar cualquier posible desperfecto o anomalía. En la fase de montaje realizaremos un primer análisis que repetiremos cuando la cometa esté totalmente montada. Antes de despegar, no solo debe estar todo revisado, sino también en perfecto estado. Ante cualquier desperfecto o desajuste, que no pueda ser arreglado en ese momento, optaremos por aplazar el vuelo.

-Posición de despegue
Nuestra aproximación al área de despegue la efectuaremos con el morro de la cometa orientado al viento. Como en el caso del parapente deberemos esperar a que las condiciones sean idóneas y a que el área de despegue y el espacio aéreo inmediato esté libre de otros pilotos u obstáculos de cualquier tipo. Una vez estemos seguros de que el viento es el adecuado y de que el resto de condiciones necesarias se cumplen, comenzaremos la carrera de despegue, siempre contra el viento, manteniendo en todo momento la cometa nivelada.

-El despegue
Tras los primeros momentos de carrera, una vez que alcancemos la velocidad necesaria, notaremos que la cometa se sostiene en el aire y que tira de nosotros ligeramente hacia arriba,

-El vuelo
Nuestro primeros vuelos serán de muy corta duración, pero nos permitirán aprender a conocer las reacciones de la cometa y por descontado las maniobras de despegue y aterrizaje, que serán las mismas independientemente de la distancia recorrida, la altura ganada y la duración del vuelo.


-El aterrizaje
El aterrizaje también se realizará con el viento en contra, lo que nos permitirá controlar el acercamiento al suelo y realizar correctamente la maniobra.


Maniobras
-Picado
Esta maniobra nos servirá para perder altura y ganar velocidad.
-Ascenso
En los primeros vuelos de nivel intermedio, a la maniobra de picado le sucederá otra de ascenso, con la que perderemos velocidad y ganaremos altura.
-Los giros
Al efectuar un giro deberemos realizar dos acciones diferentes. Ganaremos velocidad antes de iniciar el giro y desplazaremos el peso de nuestro cuerpo hacia el lado hacia el que queremos girar, empujando la barra de control en la dirección contraria y hacia adelante.